lunes, 31 de julio de 2023

Maldita


Cuando el lobo llora al astro de plata, 

me despierto bajo el manto de la madrugada 

con el corazón encogido 

y las mismas lágrimas que brotaron hace 4 años.


Un sueño que me visita cada luna llena

disfrazado de simple metáfora.

Un rompecabezas que me tortura,

la maldición que me acompaña.


Si algún día se disipa la niebla que entró esa noche de agosto,

quizás averigüe la respuesta al vacío que dejastes.

 

Pero soy testigo de que ni el silencio, 

ni las palabras,

han conseguido abrir tu corazón deshonesto.


Ya no espero que algún día tengas la compasión de quitarme estas cadenas.

Quizás necesite tenerla yo conmigo misma.